¿Brécol o coliflor? Ventajas de cada una
El brécol y la coliflor son dos de las verduras más nutritivas y deliciosas que podemos encontrar en el mercado. Sin embargo, a pesar de su enorme parecido, existen importantes diferencias entre una y otra. Por eso, tanto si ya las consumes de manera habitual como si estás planteándote incorporarlas a tu dieta, no debes perder detalle de este artículo en el que te contamos todo lo que debes saber sobre cada una de ellas. ¡Toma nota y descubre los beneficios de estos dos alimentos!
Origen, propiedades y uso del brócoli
El brécol, también conocido como brócoli, es una verdura perteneciente a la familia de las crucíferas. Tiene un peculiar aspecto redondeado y está cubierto de pedúnculos con forma de pequeños árboles, destacando especialmente su coloración, que va desde los intensos verdes hasta los morados en algunas variedades. Esta planta es originaria de Oriente Próximo, concretamente de países como el actual Líbano, la península turca de Anatolia o Siria. El brócoli llegó a Europa gracias a los romanos, quienes lo descubrieron durante sus expediciones y conquistas y no dudaron en incorporarlo a su alimentación.
No obstante, no es hasta el S.XX cuando el cultivo del brécol tiene su momento de mayor apogeo, gracias a los grandes productores estadounidenses y europeos que distribuyen esta verdura por todo el mundo. En España, las regiones que más destacan en cuanto a la producción de brócoli son Murcia y Almería.
En cuanto a sus propiedades, nos encontramos ante una verdura con un alto componente de agua, lo que reduce de manera considerable su nivel de calorías. El brécol es una fuente natural de vitaminas A, B1, C y E, fundamentales para mantener el buen aspecto de nuestra piel y hacernos más resistentes ante infecciones. Del mismo modo, destacan sus propiedades como antioxidante. En lo referente a los minerales, sobresalen los aportes de potasio, hierro, magnesio, calcio, yodo y zinc.
Coliflor, de Asia al resto del mundo
El origen de la coliflor es muy similar al del brócoli. Esta planta también fue introducida en Europa por los romanos, después de que estos la descubrieran durante sus viajes por Libia, Egipto o Siria.
Además de por el color (que en el caso de la coliflor es blanquecino u ocre), las dos verduras presentan otras diferencias visuales, como el tipo de ramificación, con troncos más gruesos y compactos que los del brócoli. En cuanto a sus nutrientes y minerales, son bastante similares. La principal diferencia está en el nivel de potasio, muy superior al que posee el brécol, así como en el de fósforo. Como contrapunto, las coliflores tienen menos vitamina A y C, y carecen de clorofila, luteína o carotenoides.
¿Brécol o coliflor? ¿Qué escoger?
Llegados a este punto puede que te cuestiones cuál de las dos verduras es mejor consumir. Lo cierto es que ambas son beneficiosas para la salud, y lo ideal es combinarlas o alternarlas de manera constante. En líneas generales, esto es lo que consigues incorporándolas en tu dieta:
– El brócoli está indicado para la prevención de algunos tipos de cáncer, para mantener una buena salud visual, para controlar la hipertensión o para conseguir una piel más tersa y suave, lo que se consigue gracias a sus antioxidantes.
– Por su parte, la coliflor es una potente hortaliza para los músculos, debido a su alto contenido en potasio. Está indicada para proteger de enfermedades degenerativas, a la vez que sirve para activar el sistema inmunológico.
Recuerda que tanto la coliflor como el brécol se pueden consumir de numerosas maneras, desde cocinados solo al vapor hasta condimentados con bechamel o como parte de una menestra de verduras. En cualquier caso, lo más importante es no excederse en el punto de cocción, ya que de esta forma mantendrán mucho mejor sus propiedades.