Células madre con fines estéticos
Los expertos en estética emplean la terapia celular para rejuvenecer la piel
Las células madre no sólo son la esperanza de los enfermos de diabetes o párkinson, sino que ya han comenzado a aplicarse con fines estéticos para, por ejemplo, resaltar los glúteos o acabar con las arrugas. Este fue uno de los avances presentados durante la primera jornada del V Congreso Internacional de Medicina Antienvejecimiento y Longevidad, que se celebró el pasado mes de noviembre en Madrid.
Edgardo Celi, hematólogo del hospital Durán de Buenos Aires, expuso las posibilidades de las células madre para mejorar el aspecto de la piel. Concretamente, el especialista argentino ha aplicado estas células -capaces de convertirse en diferentes tipos de tejidos humanos- en las gluteoplastias. «Cultivamos las células madre, junto con factores de crecimiento y un tipo de glóbulos blancos -los monocitos- que juegan un papel importante en la regeneración de tejidos, especialmente elastina, colágeno y ácido hialurónico, relacionados todos ellos con la firmeza y tersura de la piel.
Estamos usando estas células madre para frenar la pérdida de cabello incipiente y en lipotransferencia. En este último caso lo que hacemos es emplear las células troncales que se encuentran en la grasa y ponerlas en el glúteo para darle una forma agradable», declaró el especialista.
Ante las primeras experiencias positivas en este campo, varias empresas en conservación de tejidos han creado bancos de células madre a disposición de los cirujanos plásticos donde almacenar congelado el tejido adiposo que se extrae en las liposucciones.
Pasados los años, los pacientes pueden emplear ese material para rellenar arrugas, acelerar la cicatrización de tejidos u otros fines estéticos. Además, la abundancia de células madre en la grasa abre la puerta al empleo de éstas para el tratamiento de algunas patologías.