Tonificación de glúteos, abdominales y piernas, realidad y ficción
Es un conjunto de ejercicios localizados de glúteos, abdominales y piernas realizados al ritmo de la música.
- Supuestos beneficios: tonifica los glúteos, abdominales y piernas; reduce el volumen de estas zonas; mejora la silueta corporal.
- Realidad: la grasa no se puede eliminar de forma localizada por muchos ejercicios localizados que se hagan. En los glúteos, abdominales y piernas se encuentran la mayoría de los principales depósitos de grasa de la mujer, por lo que la mejora de la silueta pasa necesariamente por un trabajo cardiovascular controlado mediante frecuencia cardíaca para disminuir tales depósitos.
Pero, sin duda alguna, lo que es más grave es que no se respetan los principios anatómicos básicos, tal y como ocurre en el caso de los músculos abdominales que, debido a su bajo porcentaje de fibras rápidas, no están diseñados para realizar contracciones de una manera continua y repetida como ocurre en este tipo de clases. Los abdominales que aquí se realizan son exclusivamente de tipo hiperpresivo, lo que puede afectar negativamente al suelo pélvico (especialmente en el caso de la mujer), provocando disfunciones sexuales y problemas de incontinencia urinaria. De hecho, el estudio realizado por Bø, Bratland-Sanda y Sundgot-Borgen (2011) en Noruega, afirma que la incontinencia urinaria es frecuente entre las monitoras de fitness.
Conclusiones
Aunque a primera vista pueda parecer que actúo como un inquisidor implacable contra las clases colectivas y que mi deseo sea verlas arder en la hoguera, la realidad no es tal.
Las clases colectivas contienen elementos interesantes, especialmente los relacionados con la motivación y la diversión, y, por supuesto, son mejores que no hacer nada. Ahora bien, de ahí a afirmar que son la panacea o el elixir de la buena forma física hay un buen trecho.
La heterogeneidad de las personas que acuden a ellas, así como la imposibilidad de los monitores que las imparten de ofrecer una atención de la máxima calidad a cada persona son escollos importantes, pero, a pesar de ello, y teniendo en cuenta el principio básico de la variedad en el entrenamiento, pueden ser un complemento ameno dentro de un programa de ejercicio físico. El problema es que hay muchas personas que basan su programa de ejercicio físico exclusivamente en clases colectivas, llegando a realizar semanalmente un gran volumen de ellas.
Por tanto, se pueden hacer clases colectivas con moderación, pero siendo plenamente consciente de las limitaciones que presentan, para hacer lo posible por subsanarlas o compensarlas; y, sobre todo, sabiendo que en el mundo del fitness, como en otros tantos ámbitos, no es oro todo lo que reluce.