Halitosis ¿Qué hago contra el mal olor de la boca?
El cuerpo desprende infinidad de olores. Cuando el mal olor proviene de la boca se puede convertir en una auténtica pesadilla para quien lo sufre. La halitosis crea una imagen negativa difícil de borrar afectando de forma clara a la persona.
Halitosis, un mal extendido
La halitosis se define como el mal olor en la cavidad bucal y se puede producir por varias causas. Se trata de un síntoma bastante generalizado entre la población mundial pues se estima que un 50% la padecen en mayor o menor grado de los cuales la gran mayoría supera los 50 años de edad.
No olemos nuestro propio aliento
Uno de los problemas fundamentales a la hora de sufrir estos síntomas, es que es la persona o personas que están alrededor son quienes lo detectan, pues uno mismo no está capacitado para notar el mal aliento de su boca. Esto genera una cadena de inseguridades que nos pueden afectar a la hora de llevar a cabo las actividades cotidianas y la vida social. Es muy difícil para una persona comentar a otra que le huele el aliento por lo que la situación empeora.
El origen del mal aliento
En un 90% de los casos se puede decir que el mal aliento se origina en la boca aunque también puede deberse a afecciones de tipo estomacal,o infecciones de nariz o senos nasales. En cualquier caso, cuando existen estos problemas, el aire que sale de la nariz no huele mal, pero si huele aquel que proviene de la boca.
Causas que originan la halitosis
El motivo principal de la halitosis es bacteriano. Entre los motivos que pueden desencadenar el mal olor bucal se encuentra:
- Mala higiene bucal. Que hace que los alimentos se descompongan entre los dientes sin limpieza.
- La piorrea. Es una afección de las encías causada por el cúmulo de placa bacteriana.
- Suburra lingüinal. Es una placa blanca que se forma en la parte posterior de la lengua y que está formada por secreciones que llegan a desprender gases sulfurados.
Todas estas causas prueban una vez más que para combatir el mal aliento cuando éste proviene de la boca, es vital un buen cepillado utilizando completándolo con el uso de seda o hilo dental. Por otra parte, es importante tener en cuenta que el mal olor de la boca puede tener su causa en enfermedades más graves como padecimientos de hígado, diabetes, insuficiencia renal o enfermedades de tipo pulmonar.
Evitar la halitosis
Es importante aparte de una higiene bucal normal y regular, la ingesta de agua. El agua favorece en cualquier caso la producción de saliva que limpia la boca. También se debe de evitar el consumo de alcohol y café, así como el tabaco que no hace sino agravar el problema.
Algunos alimentos potencian en gran medida la halitosis, por su fuerte olor y la digestión de los mismos, por lo que se deben eliminar. Entre ellos figura el ajo, que destaca por su intenso olor y su sabor fuerte.