Tinte y permanente de pestañas: solución duradera para la belleza de tus ojos
Lucir unas bonitas pestañas, largas y curvadas, es una forma de feminidad y realzar la belleza de una mirada. Gran cantidad de sentimientos se expresan a través de ella, y cada vez existen más métodos para que unos ojos luzcan en todo su esplendor.
Pestañas pobres y sin vida
El tinte y permanente de pestañas es una excelente solución para las pestañas castañas claras y de poca densidad, que no destacan la mirada. Este tipo de pestañas hacen necesario el uso constante de máscara y rizador de pestañas manual, sobre todo cuando se quiere conseguir una mirada sofisticada. Además, las pestañas demasiado rectas que no tienen una forma curvilínea pasan totalmente desapercibidas, lo que hace necesario el uso diario de un rizador manual que las puede acabar deteriorando tras un uso continuado.
Resultado: pestañas largas, bonitas y llamativas
Lo que se consigue con un tinte y una permanente de pestañas es que la mirada resplandezca sin necesidad de utilizar ningún rimel, ni rizador manual. Así, las pestañas estarán curvas y negras, incluso recién levantada, y destacarán como si estuviesen maquilladas. En cualquier caso la duración de este tratamiento, al igual que una permanente de cabello, dependerá de la propia estructura del pelo, pues hay cabellos en los que dura más este tipo de productos. Con un líquido de permanente arquean las pestañas, y con un tinte especial las tiñen en color negro consiguiendo que destaquen.
Técnica de rizado y tinte de pestañas
En primer lugar y con un líquido parecido al de la permanente de pelo, pero especial para las pestañas, éstas se arquean. Dicho procedimiento se hace mediante la colocación de un pequeño bigudí o rulo que se aplica sobre la pestaña superior y que se adhiere mediante un pegamento especial. Dependiendo del tamaño del rulo se conseguirá la curvatura perfecta para cada tipo de pestañas. El producto se dejará actuar durante un periodo de tiempo, tras el cual se procede a retirarlo para aplicar un acondicionador.
En una segunda fase se aplica un tinte a las pestañas dejándolo también durante un tiempo. El resultado es una mirada profunda que de forma natural permanece al menos durante dos meses, durante los cuales no será necesario recurrir a otros métodos manuales.
Esta técnica resulta especialmente práctica durante el periodo estival en la época de piscinas y playa. Hay que tener en cuenta que en este caso como en otros muchos, es importante recurrir a un buen profesional que sea experto en este tipo de técnicas pues se trata de una zona delicada. El precio de este tipo de tratamiento de belleza puede oscilar entre los 20 y 60 euros dependiendo del centro.