Determinar el sexo de un bebe con un simple análisis de sangre
Desde tiempo inmemorial existen en la sociedad numerosas creencias para poder determinar con cierto grado de acierto el sexo del futuro recién nacido. Estos mitos, aunque en algunos casos aciertan, no son tan fiables como los científicos.
Mitos arraigados para saber el sexo de un bebe
Según la tradición popular de algunos lugares de América asocian el sexo del bebé al calendario lunar. Así, si un alumbramiento se produce en luna llena, será una niña, y si se produce en luna creciente, será un niño. Otra creencia es que la madre esté esperando un niño cuando se hincha más el pecho derecho que el izquierdo, o esperando una niña, si en el momento de acostarse se suele apoyar sobre el lado derecho de la cama. También está el calendario Chino que tiene en cuenta la edad de la madre y el mes de concepción. En cualquier caso no dejan de ser creencias curiosas que pasan de generación en generación y generan arraigo cultural.
Nuevo método para conocer el sexo de un bebe
En la actualidad y gracias a los avances científicos que se producen es posible determinar el sexo del bebe cuando existen tan sólo siete semanas de gestación. Por lo tanto es posible detectar si es niño, o niña, en la primera etapa del embarazo y con tan sólo un simple análisis de sangre. Así, en el momento presente se puede determinar desde la séptima semana de gestación el ADN fetal en la sangre de la madre y de esta forma descubrir el género del futuro hijo.
Este método resulta de gran ayuda sobre todo como método de prevención en los casos en los que el sexo del futuro bebe pueda determinar la aparición de cualquier tipo de enfermedad genética. Se trata sin duda de un sistema que no es invasivo como otros, y que no supone ningún riesgo para la madre ni para el futuro recién nacido.
Esta técnica se consolida en la actualidad como una alternativa eficaz y sencilla que se realiza a través de las células fetales halladas en la sangre de la mujer embarazada.
Método alternativo a la amniocentesis
El método que se había utilizado hasta el momento con mayor frecuencia para determinar no sólo el sexo del bebe sino también la existencia de cualquier anomalía que se produzca de tipo genético es la amniocentesis. Esta prueba prenatal resulta sin lugar a duda fiable pero también implica una serie de riesgos como puede ser el de un aborto involuntario. La ecografía es otro sistema que aunque no implica ningún riesgo para el embarazo, no se considera del todo fiable para determinar el sexo del futuro bebe.