Conoce las terapias japonesas de moda: Kobido y Shiatsu
Shiatsu y Kobido son técnicas de bienestar que se basan en principios fundamentales de la medicina oriental y la filosofía japonesa.
Las terapias japonesas son prácticas y técnicas de bienestar y salud que han ganado popularidad no solo en este país sino a nivel internacional. Terapias que se basan en principios fundamentales de la medicina oriental y la filosofía japonesa, en busca del equilibrio y la armonía en todos los aspectos de la vida.
Dicho lo anterior, a continuación se presenta dos de las terapias japonesas más conocidas: Kobido y Shiatsu.
1. El Masaje Kobido
El Kobido, es un masaje con más de 500 años de historia, que tiene sus raíces profundamente arraigadas en la cultura y tradiciones japonesas.
En un principio era concebido como un tratamiento facial exclusivo para la realeza, especialmente la emperatriz y su corte, sin embargo, actualmente el Kobido fusiona diversas influencias y técnicas convirtiéndose en la terapia holística que se conoce actualmente.
Filosofía y Método
Sumergido en la tradición de la medicina oriental, este tipo de terapia se alinea con la creencia de que la salud y la belleza son manifestaciones del equilibrio interno. A diferencia de enfoques superficiales centrados únicamente en la piel, el Kobido busca una armonía integral entre la mente, el cuerpo y el espíritu.
Definición y Técnicas
El Kobido, traducido como el “antiguo camino de la belleza”, trasciende la simple aplicación de productos faciales o manipulaciones cutáneas, ya que combina diversas técnicas manuales diseñadas para estimular los músculos faciales, mejorar la circulación y fomentar el flujo linfático.
Es así que, desde toques suaves hasta movimientos profundos de amasamiento, el terapeuta adapta la intensidad y las técnicas según las necesidades específicas de cada persona.
Estos son algunos de los asombrosos beneficios del Masaje Kobido:
• Rejuvenecimiento facial, ya que la piel obtiene una apariencia más juvenil y firme al reducir la flacidez y mejorar los contornos faciales. Por ejemplo, el Lifting Facial Kobido es uno de las mejores terapias para eliminar la flacidez y mejorar la apariencia general del órgano más grande del cuerpo.
• Mejora de la circulación porque favorece la circulación en la cara, aumentando la oxigenación celular y proporcionando una piel más luminosa y una tez uniforme.
• Reducción de arrugas y líneas de expresión brindando un efecto antienvejecimiento y de esta manera evitar intervenciones quirúrgicas.
• Estimulación del sistema linfático que permite la eliminación de toxinas y la reducción de la hinchazón, especialmente en áreas como los ojos.
• Relajación y bienestar que ayuda a liberar tensiones y equilibrar la energía del cuerpo.
• Refuerzo del sistema inmunológico que mejora la circulación y reduce los niveles de estrés.
2. Masaje Shiatsu
El shiatsu tiene su origen en Japón y a partir de técnicas más antiguas de la medicina tradicional china, proporciona un tratamiento que busca armonizar cuerpo y mente gracias a su enfoque integral del bienestar humano.
Definición y técnica
El Shiatsu, toma su nombre de los términos japoneses “Shi” (dedo) y “Atsu” (presión). Una terapia que implica la aplicación de presión con dedos, palmas, codos o rodillas en diversas áreas del cuerpo con el objetivo de fomentar el flujo de energía vital, conocida como “Qi” o “Ki”, aliviar tensiones, mejorar la circulación y promover el bienestar general.
Por tal motivo, el Shiatsu va más allá de la simple presión y tacto; es una práctica que trabaja con los canales de energía o meridianos, por los cuales fluye el “Qi”, y así mejorar la salud y bienestar general.
Filosofía y principios
En el corazón del Shiatsu se encuentra el concepto chino del Yin y el Yang, fuerzas opuestas y complementarias que equilibran el flujo de energía (“Qi”) en el cuerpo. Por ello, la terapia busca corregir desequilibrios mediante la manipulación de puntos específicos para restaurar el flujo de energía.
Beneficios del Shiatsu
Al centrarse en armonizar cuerpo y mente, el Shiatsu ofrece los siguientes beneficios físicos y psicológicos:
• Alivio del dolor, incluyendo dolores musculares y de cabeza.
• Mejora de la circulación sanguínea.
• Fortalecimiento del sistema inmunológico.
• Mejora de la flexibilidad y movilidad.
• Regulación del sistema digestivo.
• Reducción del estrés y la ansiedad.
• Mejora del estado de ánimo mediante la manipulación de puntos de energía.
• Mayor conciencia corporal.
• Mejora de la calidad del sueño.
